Última actualización el 24 de julio de 2024
Y lo peor es que la supe en una experiencia monetaria propia, que es como decir “a las malas” ya que experimenté la inflación en carne y bolsillo propio.
Cuando se hablaba de inflación y de hiperinflación por supuesto que me venía a la mente la devaluación de monedas como el Bolívar, de Venezuela, o el desaparecido Sucre, de Ecuador. Otra moneda está en vía de extinción y su salida del espectro monetario es lo que me ha dejado el amargo sabor de la inflación.
El CUC (Cubano Convertible) fue una moneda alternativa a la moneda oficial cubana conocida como CUP (Cubano Peso) Esta variante monetaria con diversas denominaciones supuestamente pugnaba por mantener una paridad con monedas fuertes como el dólar y el euro. En Las casas de cambio cubanas (CADECA, por sus siglas) El CUC se cotizaba a 26 CUP, y a su vez, ese mismo CUC accedía a la compra de divisas con un canje bastante fuerte: 1,30 CUC por 1 EUR, y hasta 1 CUC por 1 USD. En este canje isleño, existieron otras monedas que se canjearon por debajo del CUC, como por ejemplo el dólar canadiense, el peso mexicano, el franco suizo y el hasta el Yuan japonés.
Monedas que suben y bajan
El sorprendente desempeño monetario del CUC lo posicionó durante años por encima del dólar, ya que por muchos años en Cuba se aplicaba un gravamen en las casas de cambio del país (CADECA) que consistía en retener el 10 porciento de la cantidad a canjear, y del resto aplicar el 1X1 o a veces a menos. Hubo momentos en los cuales, si un turista acudía a una CADECA a cambiar 100 dólares, después de aplicado el gravamen del 10 por ciento, a los 90 restantes de les aplicaba el canje 0,80 CUC X 1 USD. El resultado monetario matemático era sorprendente para muchos: 100 USD se convertían en 72 CUC.
Juegos de bancos que siempre ganan
Tal vez este gravamen al dólar, la moneda con más entrada a Cuba por mucho tiempo, hizo que se estableciera el canje alternativo o de mercado negro, que se trata de un canje monetario que no es oficial. El mercado informal cubano, a sabiendas de que el dólar perdía más si se enfrentaba a un canje en CADECA, ofrecía cambiarlo más alto, pero nunca con una paridad frente al CUC (1 CUC por 0,96 hasta 0,90 USD)
En este escenario de fortaleza para el CUC (Cubano Convertible) nuestra familia decidió vender un patrimonio “valioso”. Es conocido que el negocio de compra venta de automóviles en Cuba está deprimido al punto que nuestro auto ruso, Moscovich, que adquirimos de segunda mano, valioso por ser un patrimonio sentimental de más de 40 años y por su valor comercial dadas las circunstancias de los autos en la isla, lo vendimos por 12 000 CUC y 3000 euros.
Primero eran miles, después, como de la nada, solo unas decenas
Hubiera sido una venta estelar, si nosotros hubiéramos decidido cambiar el CUC (moneda alternativa cubana) por dólares o euros, pero ingenuos y confiados en la fortaleza de esa moneda, hicimos una cuenta a plazo fijo con 10 000 CUC. Y aquí viene el fin de esta historia de monedas e inflación en la que hay que entender todos los contextos, incluso el del mercado negro.
Iniciada la etapa pandémica en Cuba (y en todo el mundo) la economía de la isla da un vuelco bajo el nombre “Reordenamiento económico” y el paso monetario fue sacar de circulación el CUC. A partir de ese momento se le dio chance a los propietarios de cuentas en CUC para canjear sus ahorros a CUP (Cubano peso) con el siguiente canje oficial: 1 CUC por 26 CUP. Con solo una firma, tuvimos en familia una cuenta de 260 000 CUP. Y a partir de ese momento, comenzó a devaluarse la moneda cubana oficial a la que habíamos cambiado nuestros CUC.
Lo perdido, jamás se podrá recuperar
Las condiciones terribles de la pandemia, las guerras y los enfrentamientos, el calentamiento global y el enfriamiento de las economías, el bloqueo económico a Cuba, el desabastecimiento generalizado, la nula producción nacional, la necesidad extrema de importaciones, la estrecha capacidad de exportación, las crisis políticas y comerciales, las deudas externas y eternas, todo, absolutamente todo pueda que tenga la culpa, pero no nos importa, lo que nos importa, y más que importarnos, lo que nos duele en el corazón de nuestra economía familiar, es que el CUP comenzó a devaluarse cada vez más, y cuando la oficialidad cubana situó el canje del dólar estadounidense frente al CUP, explotó la inflación: 1 USD por 125 CUP.
Lección de Inflación aprendida por experiencia propia: tuvimos 10 000 CUC en el banco, que hubieran sido más de esa cifra en USD, pero al sacar de circulación ese CUC que nos canjearon a 26 CUP, y devaluarse dicho CUP, nos quedaron solo el equivalente a 2080 USD. Y otra vez la ingenuidad y la esperanza en la revaloración monetaria nos hizo no tocar los devaluados CUP, y como las CADECA (casas de cambio cubanas) no tienen efectivo para el canje cotidiano, otra vez el mercado negro (bastante politizado, esa es una verdad) ha impuesto una volatilidad del canje. Por eso ahora, de aquellos 10 000 CUC fuertes que eran más de 10 600 USD, y ante un canje de 1 USD por 350 CUP, tenemos en el banco la pírrica y lamentable suma de 742 USD.