Última actualización el 31 de agosto de 2024
Lea al final la propuesta para que el año de prórroga sea más provechoso
El próximo 25 de octubre la Ley de Memoria Democrática cumplirá dos años desde su aprobación. A partir de ese momento solo quedará el año de prórroga para que los miles de descendientes en todo el mundo puedan acceder a la nacionalidad española. Un año, hasta 2025, hablando en términos de tramitaciones, no es suficiente.
Los tiempos de espera son demasiado extendidos. Eso afectará a quienes han pasado meses en el empeño de reunir documentos, hacer subsanaciones, legalizar partidas de nacimiento y armar el expediente.
Cuenta regresiva y mucha incertidumbre
A los 365 días de prórroga hay que quitarles los fines de semana y los numerosos días festivos. Hasta ahora el consulado con un desempeño más complicado en la tramitación es el de La Habana. Si no acorta los tiempos cuanto antes, esta sección consular estará resolviendo la nacionalidad de los descendientes en un plazo de 14 largos meses desde la solicitud de credenciales.
En Cuba se viven momentos complejos por la escasez de personal consular para tramitar los miles de solicitudes de ciudadanía española. Un detalle significativo es que no se tomaron en cuanta desde el principio los viceconsulados honorarios de Santa Clara, Camagüey y el de Santiago de Cuba para aligerar al menos la masiva entrega de documentos.
Los descendientes de españoles que radican en la isla se preguntan qué sucederá después del 25 de octubre del próximo año. Claramente nadie sabe como cesará la recepción de expedientes, sobre todo porque la concesión de credenciales para sacar cita tiene una demora actual de 8 meses y ya se acerca a los nueve.
Miedos consulares
A cada cierto tiempo una noticia de aliento recorre las redes sociales para advertir que en la Lonja del Comercio (donde se reciben los expedientes de nacionalidad) se habilitan nuevas salas. Pero la realidad es que lo que falta no es espacio si no más funcionarios. Claramente el consulado español en Cuba necesita tener un personal confiable, preparado en términos de documentación y leyes, pero sobre todo que no cometa actos corruptibles.
Quienes tramitaron en la Ley anterior recuerdan que al no existir el demorado proceso de recibir credenciales para agendar cita, muchos se presentaban solo con el anexo y el carné de identidad y luego aportaban los documentos necesarios.
Sin embargo esto fue quizás la principal causa para que decenas de miles de expedientes permanecieran por años varados en la sección consular a la espera de su resolución. Recordemos que faltando muy poco para que se aprobara la Ley de Memoria Democrática, el consulado de España en La Habana tenía pendientes más de 70 mil carpetas de solicitud de la Ley de Memoria Histórica.
Preguntas que duelen
¿Cómo es posible que un legítimo descendiente de español tenga que esperar casi nueve meses para poder sacar cita y entregar su expediente? Las dudas como esta, llenas de dolor e incertidumbre se unen al pánico ante un posible requerimiento, o una denegación cuando llegue la hora de revisión.
La isla se ha llenado de gestores populares que cobran sumas elevadas y que no tienen un conocimiento preciso de la tramitación, por lo cual exigen a sus clientes más documentos de los necesarios, lo cual significa más demora en la tramitación. Lo hacen sobre todo en los casos de quienes optan a la ciudadanía por ser bisnietos de un español que tuvo sus hijos en Cuba y estos debieron nacer originariamente españoles.
La angustia en las redes llega a tal punto que no pocos, abrumados por la odisea, abandonan la tramitación. Justamente la palabra Odisea sirvió como título para que el programa humorístico más popular de la televisión cubana abordara los procesos angustiantes.
La propuesta para que el año de prórroga sea más provechoso
Hay posibilidad de que el año de prórroga que casi comienza en su cuenta regresiva sea provechosa para que más descendientes puedan optar. Desde Heraldo Universal hacemos una propuesta a los encargados del registro civil del Consulado de España en La Habana.
Si se habilita personal en los viceconsulados honorarios de Villa Clara, Camagüey y Santiago de Cuba, de seguro se acortarán los tiempos de entrega. Cuatro sedes de presentación de expedientes es la solución precisa para que más personas tengan oportunidad de hacer su ejercicio de opción antes de que finalice la ley. Estas sedes vice-consulares se encargarían de enviar al Consulado General los documentos de cada interesado.